Siempre me ha gustado hacer cosas para cambiar mi imagen de vez en cuando, no soy del todo conservadora en ese aspecto, me he arriesgado cortando mi cabello más allá de lo conveniente para mi tipo de cara, lo he pintado de colores extraños, he usado ropa extravagante y hasta medio hippie. Pero siempre quise hacer “algo más”.
Aclaro que no todas las locuras me parecen viables para mi persona, sólo algunas son las que llaman mi atención. Los tatuajes son una de ellas. Me gustan, desde que estaba en la secundaria quise ponerme uno pero no me atreví, por miedo a ser desheredada o algo por el estilo. En mi familia nadie tiene un tatuaje y ni pensar que alguien se atrevería a ponerse uno.
Nadie, excepto yo. No se si el hecho de que soy la más pequeña de mi familia es lo que me hace diferente al resto, pero similar al mismo tiempo. Hace unos días fuimos Rodrigo y yo a hacer investigación sobre los lugares que se dedican a hacer ese tipo de trabajos. Visitamos varios lugares para checar las instalaciones, la higiene y ver los trabajos que hacen los artistas del tatuaje.
Porque son artistas, capaces de hacer unos dibujos tremendos en la piel de aquellos valientes a quienes les gusta decorar su cuerpo, o como diría Rodrigo “personalizar su cuerpo”. Después de mucho buscar, en Internet sobre todo, elegí el diseño que plasmaría en mi piel para siempre, no fue nada fácil, porque hay muchas cosas que me gustan. Pero me debatía en si me gustaban lo suficiente como para hacerlas parte de mi de manera permanente. Cambié de opinión un par de veces antes de tomar la decisión final.
Nada que estuviera de moda. Tendría que ser algo intemporal con lo que me sintiera identificada. Y lo encontré. Ya estaba decidido. Hice una cita con los chavos de Mystique. Me preparé psicológicamente y llegamos mi novio y yo a la cita (ya saben, por aquello del apoyo emocional y por si intentaba correr jeje). En cuestión de minutos estuvo todo listo y me pasaron a la sala de tatuajes, con varios espejos y aire acondicionado. Tomé mi lugar en la silla de los torturados y Rodrigo, con cámara en mano, se dedicó a observar y apoyarme moralmente.
Esperaba que el proceso durara media hora cuando menos, pero no habían pasado ni 15 minutos cuando escuche la voz que me decía ¡Listo! No lo podía creer, corrí al espejo para ver mi nuevo diseño. Había quedado tal y como lo pensé. ¿Qué si duele? No les voy a mentir diciendo que no, pero tampoco les diré que es un dolor que no se pueda tolerar, además mi tatuaje es pequeñito por lo tanto menos doloroso. Pero nada mas piensen, si el dolor fuera insoportable ¿Cómo es que tantas personas tienen tatuajes enormes en sus cuerpos?
Vimos fotos de personas cuyos tatuajes son impresionantes, pueden ser retratos de personas amadas, diseños exclusivos creados por uno mismo, personajes míticos como dragones, hadas, unicornios, etc., pueden ser animales, frases en alguna idioma extraño, símbolos y muchas cosas más. El hecho de que a mi me guste esta onda, me obliga a decir que es fascinante.
Pero esto es sólo para aquellos que son partidarios de personalizar su imagen de manera permanente. Un par de consejos: nunca, pero nunca, se pongan un tatuaje que signifique algo para alguien más, o el nombre o rostro de alguien que no sea de su familia... porque la vida gira y lo que hoy te parece maravilloso, mañana te podría parecer odioso y no querrás tenerlo en tu piel durante años; y siempre vigila muy bien el establecimiento que elijas para hacerte un tatuaje, debe ser higiénico y contar con todos los documentos que lo acrediten como un negocio legal.
Si ya tienes un tatuaje que adorne tu cuerpo, te felicito y si decides hacerte uno... bienvenido al club.
Saluditos!!
Cheryl
Aclaro que no todas las locuras me parecen viables para mi persona, sólo algunas son las que llaman mi atención. Los tatuajes son una de ellas. Me gustan, desde que estaba en la secundaria quise ponerme uno pero no me atreví, por miedo a ser desheredada o algo por el estilo. En mi familia nadie tiene un tatuaje y ni pensar que alguien se atrevería a ponerse uno.
Nadie, excepto yo. No se si el hecho de que soy la más pequeña de mi familia es lo que me hace diferente al resto, pero similar al mismo tiempo. Hace unos días fuimos Rodrigo y yo a hacer investigación sobre los lugares que se dedican a hacer ese tipo de trabajos. Visitamos varios lugares para checar las instalaciones, la higiene y ver los trabajos que hacen los artistas del tatuaje.
Porque son artistas, capaces de hacer unos dibujos tremendos en la piel de aquellos valientes a quienes les gusta decorar su cuerpo, o como diría Rodrigo “personalizar su cuerpo”. Después de mucho buscar, en Internet sobre todo, elegí el diseño que plasmaría en mi piel para siempre, no fue nada fácil, porque hay muchas cosas que me gustan. Pero me debatía en si me gustaban lo suficiente como para hacerlas parte de mi de manera permanente. Cambié de opinión un par de veces antes de tomar la decisión final.
Nada que estuviera de moda. Tendría que ser algo intemporal con lo que me sintiera identificada. Y lo encontré. Ya estaba decidido. Hice una cita con los chavos de Mystique. Me preparé psicológicamente y llegamos mi novio y yo a la cita (ya saben, por aquello del apoyo emocional y por si intentaba correr jeje). En cuestión de minutos estuvo todo listo y me pasaron a la sala de tatuajes, con varios espejos y aire acondicionado. Tomé mi lugar en la silla de los torturados y Rodrigo, con cámara en mano, se dedicó a observar y apoyarme moralmente.
Esperaba que el proceso durara media hora cuando menos, pero no habían pasado ni 15 minutos cuando escuche la voz que me decía ¡Listo! No lo podía creer, corrí al espejo para ver mi nuevo diseño. Había quedado tal y como lo pensé. ¿Qué si duele? No les voy a mentir diciendo que no, pero tampoco les diré que es un dolor que no se pueda tolerar, además mi tatuaje es pequeñito por lo tanto menos doloroso. Pero nada mas piensen, si el dolor fuera insoportable ¿Cómo es que tantas personas tienen tatuajes enormes en sus cuerpos?
Vimos fotos de personas cuyos tatuajes son impresionantes, pueden ser retratos de personas amadas, diseños exclusivos creados por uno mismo, personajes míticos como dragones, hadas, unicornios, etc., pueden ser animales, frases en alguna idioma extraño, símbolos y muchas cosas más. El hecho de que a mi me guste esta onda, me obliga a decir que es fascinante.
Pero esto es sólo para aquellos que son partidarios de personalizar su imagen de manera permanente. Un par de consejos: nunca, pero nunca, se pongan un tatuaje que signifique algo para alguien más, o el nombre o rostro de alguien que no sea de su familia... porque la vida gira y lo que hoy te parece maravilloso, mañana te podría parecer odioso y no querrás tenerlo en tu piel durante años; y siempre vigila muy bien el establecimiento que elijas para hacerte un tatuaje, debe ser higiénico y contar con todos los documentos que lo acrediten como un negocio legal.
Si ya tienes un tatuaje que adorne tu cuerpo, te felicito y si decides hacerte uno... bienvenido al club.
Saluditos!!
Cheryl